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Poeme de Flavia Cosma din volumul "Fieras y sombras". Traducere: LUIS RAUL CALVO
 
El sendero del amor

El día se enfría con el hielo de la muerte
las nubes con puños apretados me oprimen el pecho
por el camino velado voy a ciegas infinitamente
las flores, las abejas, los pájaros
corren en todas las direcciones, asustados.
La risa desnuda, excitada, se queda
recorriendo las grandes habitaciones
subiendo los escalones altos, bajando
pegándome al pasar con su mordaz respiración
invadiendo los rincones del corazón.

¿Por qué caí nuevamente
en esta trampa?
Más allá de rejas doradas
el ángel me muestra silencioso
el sendero del amor.
Pero su brazo, manco
y triste, cojea.


Respuestas

La noche se llena de torbellinos de estrellas
(a ti te habría gustado esta cosa, Vincent Van Gogh).
Conocemos las respuestas
antes de preguntar.
La luna aparece pesada por entre los pinos
turbado, el triste borracho
empieza a mascullar
perdiendo su cordura.
La gente se apura, hace colas
para ver a los psicólogos, psiquiatras
mediadores, chamanes, gurús, curanderos
evitando con cierto disimulo
aquello que está sangrando en la cruz
por nuestros pecados, por los poemas que hemos
alejado de nosotros o nos negamos a escribir.

Porque todo agobio conduce más temprano
o más tarde a la no existencia; el único logro
exitoso en la vida es engañar al tiempo.


Caminos prohibidos

Tomaba la piel del gato
envolviéndome en ella.
Tomaba el rostro del gato
bebiendo su misterio.
Tomaba los ojos hondos de carbones encendidos
y me calentaba con sus luces.

Tomaba la luna en mis brazos
y viajaba.

¿Adónde van hoy las naves azules
hacia cuáles orillas, hacia cuáles sueños?
El camino hacia ti está cerrado
hundido en sí mismo.
Llamados a ser salvajes, unos gatos menudos
investigan las habitaciones, temprano por las mañanas
queriendo saber si alguien sigue viviendo por aquí.


Sin rastros

El animal salvaje, menos salvaje ahora agacha
su cabeza en mis palmas.
En momentos de vigilia, casi somnoliento, se
olvida de las preocupaciones, cierra los ojos
relajando las orejas puntiagudas.
Su pequeño corazón no se sobresalta más frente
a cualquier crujido de hojas, cayendo abajo el frio
y la lluvia.
Pasamos juntos un tiempo, como una eternidad
cuando todas las cosas se pronuncian tras los latidas
del corazón.
Luego, sacudiéndose como frente a una descarga
él sale moviendo su cuerpo, deslizándose a lo largo
y a lo ancho del camino.
El otoño lo atrapa sin dejar rastros.


Misterios

En la estrecha cama
inventamos otros sabores para el beso
descubrimos otro nombre para el amor
en la frontera entre los años
construimos frases débiles
para describir el misterio que nos une
la dulce pasión que poco a poco
nos corta las alas.


En alta mar

En alta mar los objetos se separan
se dividen en cosas útiles o solo
decorativas.
El barco con velas, el ancla.
La rosa de los vientos, la brújula
los signos Morse y del otro lado
conchas, sirenas, los átomos del corazón
volviéndose locos por la añoranza.

El azar hace que hasta el final
el misterio los envuelva a todos
en su velo transparente y sinuoso.

Reunidas, todas las cosas vuelven a ser
extremadamente bellas, como la niebla.

 

Sursa: Flavia Cosma, 24 februarie 2018